• No results found

Distrito (de norte a sur) Localidad

6 Fonética del español de Panamá

6.2.2.5 Las vibrantes

6.2.2.5.1 Vibrante múltiple /r/

De las observaciones para la vibrante múltiple surgen tres alófonos en el español de Panamá: uno vibrante y dos no vibrantes. Aunque los dos no vibrantes contienen el elemento

43 La fricación de las vibrantes en el español es un fenómeno ampliamente reconocido dentro de la fonética española, lo que crea la necesidad de la representación adecuada para ésta. Sin embargo, no todos los autores la representan de igual manera. Por ejemplo, Tomas Navarro (1970), en su manual, utiliza el símbolo [ɹ̠̌] para el vibrante múltiple asibilado y [ɹ̌] para el vibrante simple asibilado. Navarro (1970: 120, 124) no habla del alófono fricativo pues arguye que la forma asibilada tiene como base la forma fricativa. Por lo tanto, suponemos que es esa la razón por la que Navarro mantiene [ɹ̌] y no [ř] en la forma asibilada del fonema; [ɹ] representa la fricación.

Elsie Alvarado (1971: 106-107), por su parte, utiliza el símbolo [ɹ̠] para el alófono vibrante múltiple fricativo y [ɹ] para el alófono vibrante simple fricativo en posiciones posnucleares, mientras que Guitart y Zamora (1982:

97) utilizan el símbolo [ŕ] para la articulación del fonema vibrante simple de manera fricativa. Por último, Antonio Quilis (1999: 350) se refiere a la fricación de las vibrantes como la realización asibilada, representándola con el símbolo [ř] y sin hacer distinción simbólica entre la forma asibilida y la fricativa, “la realización asibilada, […], se caracteriza por poseer una fricación turbulenta que ocupa la mitad superior de su espectro” (Quilis 1999: 350).

En nuestro caso, puesto que hemos decidido adoptar la simbología del AFI, el problema surge entonces cuando se quiere adoptar el símbolo [ɹ], propuesto por el AFI. Dicho símbolo se refiere al alófono aproximante de la vibrante y deja el elemento fricativo por fuera, sin dejar otra alternativa para la fricación que requerimos marcar.

Así pues, teniendo en cuenta que nuestros datos plantean la necesidad de incluir el elemento fricativo, adoptamos el símbolo [ɹ̌] propuesto por Navarro Tomas para indicar el alófono cuando se realiza de manera asibilada, puesto que marca la fricación y la asibilación ([ɹ] + [ ̌ ] = [ɹ̌]). En lo demás se sigue adoptando la simbología del AFI (2005).

fricativo, uno es asibilado ([ɹ̌]) y el otro no ([ɹ̝]). A continuación presentamos su distribución geográfica en los mapas 49 y 50.

Mapa 49 /r/ inicial en rojo

HM MM

HJ MJ

ˈ

ˈɹ̌h

ˈɹ̝h

Polifónico  ~ɹ

Polifónico ɹ̌ ~ɹ̝ Polifónico r~ ɻ

Mapa 50

/r/ intervocálica en perro

HM MM

HJ MJ

ˈ

ˈɹ̌

ˈɹ̝

Se observa en los mapas 49 y 50 que el elemento fricativo de las vibrantes en posición prenuclear está presente a lo largo de todo el país. Sin embargo debemos destacar algunas localidades que mantienen la vibrante múltiple, sin rasgos fricativos, como único alófono.

Ellas son: Panamá, Penonomé, La Palma y Pedasí. En los dos contextos fonéticos, la forma fricativa no asibilada, [ɹ̝], se detectó sobre todo en la parte central, aunque en posición intervocálica vemos que el fenómeno se extiende un poco más hacia el occidente. La forma fricativa asibilada, [ɹ̌], por su parte, está ausente en la zona oriental cuando se encuentra en posición inicial de palabra y ausente en el occidente cuando se encuentra en posición intervocálica.

Porcentualmente, los resultados obtenidos fueron los siguientes:

Posición Contexto Alófonos registrados por número de informantes y porcentajes Tabla 23: porcentajes de frecuencia de los alófonos de la vibrante múltiple

Como se puede ver en la tabla 23, el fonema /r/ se mantiene, en la inmensa mayoría panameña, según la descripción articulatoria estándar para este fonema: “por medio de dos o más oclusiones breves entre el ápice de la lengua y los alvéolos” (Quilis 1999: 330). Al igual que Quilis y Graell (2003: 348), en este estudio tampoco encontramos la fricativa uvular sonora, [ʁ], en posición intervocálica, que menciona Stanley Robe (1960: 51). Los otros dos alófonos no vibrantes se presentaron con mucha menor frecuencia, aunque, como mencionamos antes, en todo el país. De los dos alófonos fricativos, el asibilado tiene un poco más de participación. Cuatro casos de polifonía se presentaron en posición inicial, tres de ellos entre [r] y [ɹ] (rojo Æ [ˈr] ~ [ˈɹ]).

A grosso modo, podemos afirmar que el comportamiento del fonema /r/ inicial e intervocálico no presenta diferencias que lleven a concluir contundentemente una diferencia marcada en la realización de este fonema por parte de hombres y mujeres. Sin embargo, si miramos detalladamente, notamos que las mujeres tienen una ligera tendencia a fricativizar el fonema en mayor medida que los hombres, aunque los márgenes diferenciales son muy

estrechos. La diferencia más significativa se presentó en el porcentaje de articulación del alófono fricativo, [ɹ̝] en posición intervocálica. Las mujeres lo realizaron en un 13,2 por ciento, mientras que los hombres en un 5,3 por ciento.

Ahora, no sucede lo mismo con los datos obtenidos según la generación. Allí se nota con gran claridad que la generación mayor tiende a fricativizar el fonema en mayor medida que la generación joven, sobre todo en posición inicial. En posición intervocálica la diferencia es menos contundente, aunque la mayoría sigue siendo para el grupo de los mayores. La fricativa no sibilante, [ɹ̝], por ejemplo, se presentó casi exclusivamente entre los mayores.

Sólo un informante, de los seis que articularon el alófono, era del grupo de los jóvenes.

Tabla 24: Informantes y porcentajes según el sexo y la edad para el fonema /r/

6.2.2.5.2 El archifonema /ʀ/

De las grabaciones realizadas para este fonema se lograron establecer cuatro alófonos;

el vibrante simple, [], el fricativo alveolar sonoro sibilante [ɹ̌], el no sibilante [ɹ̝], el aproximante retroflejo [ɻ], y un caso de elisión [].

A grandes rasgos, se puede decir que la forma alofónica más común para este fonema es la forma vibrante simple, []. En cuanto a las otras formas alofónicas, se pueden señalar algunas tendencias dialectales en el plano cartográfico. Para hacernos una idea de ello, ilustramos a continuación su distribución geográfica en los siguientes mapas.

Porcentajes (%)

Mapa 51

/ʀ/ final en cocinar

HM MM

HJ MJ

ˈ

ˈɹ

ˈɹ̝

lambdacismo // Æ //

Mapa 52

/ʀ/ nte /k/ en mercado

HM MM

HJ MJ

ˈ

ɹ̝ˈ

Mapa 53

/ʀ/ ante /n/ en viernes

HM MM

HJ MJ

ˈ

ˈɹ̝

ˈɻ

ˈ Æ 

Falta el dato

Mapa 54

/ʀ/ ante /m/ en enfermera

HM MM

HJ MJ

ˈ

ɹ̝ˈ

ɻˈ

Falta el dato

Mapa 55

/ʀ/ ante /l/ en perla

HM MM

HJ MJ

ˈ

ˈɹ̝

ˈː

ˈ

ˈɹ

Mapa 56

/ʀ/ ante /s/ en cárcel

HM MM

HJ MJ

ˈ

ˈɹ̝