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Modelización costera de inundación generada por oleaje

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TRABAJO FIN DE GRADO

MODELIZACIÓN COSTERA DE INUNDACIÓN GENERADA POR OLEAJE

Ariadna Martín Oliva

Grado de Física Facultad de Ciencias

Año Académico 2019-2020

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MODELIZACIÓN COSTERA DE INUNDACIÓN GENERADA POR OLEAJE

Ariadna Martín Oliva

Trabajo de Fin de Grado Facultad de Ciencias

Universidad de las Illes Balears

Año Académico 2019-20

Palabras clave del trabajo:

Nivel del mar, inundación, atolones de coral, SWASH

Nombre Tutor/Tutora del Trabajo: Marta Marcos Moreno

Se autoriza la Universidad a incluir este trabajo en el Repositorio Institucional para su consulta en acceso abierto y difusión en línea, con fines exclusivamente académicos y de investigación

Autor Tutor No No

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´ Indice

1. Introducci´on. 6

2. Objetivo y Metodolog´ıa. 9

2.1. Dise˜no de Perfiles . . . 9 2.2. Modelo num´erico de propagaci´on de oleaje: SWASH . . . 11 2.3. Forzamientos . . . 13

3. Resultados. 14

3.1. An´alisis de absorci´on de energ´ıa en el arrecife . . . 14 3.2. An´alisis de inundaciones . . . 18

4. Conclusiones. 19

5. Anexos. 21

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1. Introducci´ on.

Las costas albergan algunas de las mayores zonas urbanas y de comercio de todo el mundo. Debido a su alta densidad de poblaci´on y su gran impacto en la econom´ıa mundial, las costas se han convertido en objeto de numerosos estudios. La importancia de mantener los centros tur´ısticos y econ´omicos y los ecosistemas protegidos, propician el estudio de la posible evoluci´on de estas zonas, as´ı como de los riesgos a los que se enfrentan bajo futuras condiciones de cambio clim´atico. Uno de los factores m´as importantes en t´erminos de riesgo son los cambios en el nivel del mar, incluyendo eventos extremos.

Por eventos extremos nos referimos aqu´ı a elevaciones del nivel del mar que se producen por la suma de diferentes factores: nivel medio del mar, mareas, ondas de tormentas y oleaje. Peque˜nos cambios en el nivel medio del mar pueden provocar grandes cambios en la frecuencia de eventos extremos y por tanto de inundaci´on. Se ha demostrado de forma inequ´ıvoca que existe una huella humana en los cambios de nivel del mar y que el incremento de concentraciones de gases de efecto invernadero derivados de la actividad industrial es la principal causa de la subida observada, al menos desde 1970 (Oppenheimer et al., 2019). Adem´as, en el ´ultimo informe del Panel Intergubernamental para el Cambio Clim´atico (IPCC-AR5) publicado en 2013, donde se proporcionan las proyecciones futuras del aumento del nivel del mar, se se˜nala que el nivel medio del mar aumentar´a bajo todos los posibles escenarios clim´aticos evaluados durante el presente siglo y posteriormente.

Esto incluye incluso escenarios de emisiones reducidas como el establecido en el Acuerdo de Par´ıs, debido a procesos a largo plazo, producidos por un aumento ya irrevocable de la temperatura del planeta.

El aumento del nivel del mar no es homog´eneo espacialmente. Algunas zonas, espe- cialmente los tr´opicos, notar´an las consecuencias derivadas del cambio clim´atico en esta variable mucho antes, y de manera m´as dr´astica. En estas regiones se concentran numero- sas islas de baja altitud que se ver´an fuertemente expuestas a episodios de inundaci´on m´as frecuentemente. El presente estudio se centra en las Islas Maldivas, situadas en el Oc´eano

´Indico (Figura 1). Se trata de un archipi´elago compuesto por atolones coralinos y grandes bancos de arena, que envuelven las islas y las defienden de los oleajes que llegan a sus costas. Es una regi´on particularmente vulnerable por su alta densidad de poblaci´on y su baja altitud. Los oleajes en esta regi´on pueden ser provocados por tormentas tropicales, aunque en su gran mayor´ıa se deben a olas de viento generadas lejos de la regi´on (cono- cidos como swells). En las Maldivas existen cuatro zonas de generaci´on de swell, siendo los m´as intensos los que provienen del Oc´eano Austral (Figura 2). Es previsible que es- tas formaciones de oleaje tambi´en se vean afectadas por el cambio clim´atico. Entre otras cosas, por ejemplo, las proyecciones de cambio clim´atico basadas en modelos globales de oleaje indican que el n´umero de eventos de swell aumentar´a (Amores et al., submitted) en la regi´on de las Maldivas.

Los impactos de las zonas costeras dependen del aumento del nivel medio de mar y de los efectos de la presi´on atmosf´erica y el viento (que generan ondas de tormenta y oleaje), como se ha mencionado anteriormente. A estos factores deben a˜nadirse otros relacionados con la batimetr´ıa y la forma de cada costa. Numerosos estudios han demostrado que no tener en cuenta alguno de estos factores lleva a una subestimaci´on significativa del riesgo de inundaci´on. En concreto en el caso de las Maldivas, el factor m´as relevante es el efecto del oleaje a trav´es de sus contribuciones de run-up y, en especial, del set-up (Oppenheimer

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et al., 2019), ya que en esta regi´on las ondas de tormenta son muy peque˜nas (como ocurre en general en todas las zonas tropicales).

Figura 1: Localizaci´on del archipi´elago maldivo en el Oc´eano ´Indico. Imagen extra´ıda del art´ıculo Amores et al.(submitted)

Existen barreras naturales que frenan la llegada del oleaje a las costas y las protegen de los eventos de inundaci´on. En el archipi´elago maldivo estas defensas son los arrecifes de coral y los manglares que envuelven las islas. Los manglares son una defensa contra oleaje muy extendida en zonas tropicales de baja altitud. Sin embargo, dejan de ser eficaces como m´etodo de protecci´on cuando el aumento relativo del nivel del mar (RSL - Relative Sea Level) aumenta de manera significativa. Existen evidencias de que este punto se encuentra, con gran probabilidad, en los 6.1 mm yr−1 (Saintilan et al., 2020). En el caso de los tr´opicos el aumento de RSL superar´a este valor para los escenarios de alta emisi´on a finales de siglo, aproximadamente con un valor de 10mm yr−1. Bajo escenarios de alta concentraci´on de gases, los manglares dejar´ıan de funcionar como barrera de protecci´on ante eventos de inundaci´on y oleaje.

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Los arrecifes coralinos son la barrera natural m´as eficaz para la protecci´on costera frente a la acci´on del oleaje. En condiciones normales pueden llegar a absorber entre el 70-90 % de la energ´ıa incidente, como se ver´a en la secci´on 3.1. Los corales generan cambios en el fondo de los arrecifes, provocando transformaciones en la altura y direcci´on del oleaje (Gonz´alez-Lamu˜no Rubiera et al., 2014). De esta manera llevan a cabo procesos de rotura y dispersi´on. El da˜no que el oleaje puede llegar a provocar sobre ellos es m´ınimo, y en condiciones normales f´acilmente regenerable. Sin embargo, la mayor´ıa de estos ecosistemas se encuentran en declive debido al aumento en la temperatura del nivel del mar, entre otros factores. El blanqueamiento de los corales reduce su eficacia como m´etodo de protecci´on ante el oleaje.

Nos encontramos actualmente en una situaci´on en la que el aumento del nivel del mar puede provocar grandes inundaciones en las costas Maldivas, y las barreras natu- rales que las protegen est´an disminuyendo. En este trabajo nos centraremos en simular num´ericamente el oleaje y la inundaci´on bajo distintas condiciones de forzamientos. Las simulaciones que se han llevado a cabo en este proyecto tienen en cuenta que el oleaje es precisamente el factor principal en el riesgo de inundaci´on. Se consideran cambios en la batimetr´ıa y diferentes forzamientos caracter´ısticos del swell que alcanza las costas (secciones 2.1 y 2.3). Concretamente se han considerado ´unicamente los eventos de oleaje provocados por el swell del Suroeste, el m´as frecuente de todos y de mayor intensidad (ver Figura 2), con el fin de limitar el n´umero de simulaciones num´ericas debido a su alto coste computacional, como se explicar´a m´as adelante. Sin embargo, la misma metodolog´ıa podr´ıa aplicarse a cualquier otro forzamiento y regi´on.

Figura 2: Proyecci´on de los eventos de swell sobre el archipi´elago maldivo, en las cuatro direcciones de generaci´on. Imagen extra´ıda del art´ıculo Amores et al.(submitted)

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2. Objetivo y Metodolog´ıa.

El objetivo de este proyecto es el estudio de los efectos de la subida del nivel del mar en las islas Maldivas y sus impactos en t´erminos de inundaci´on. Si bien es cierto que las proyecciones futuras del nivel del mar causar´an grandes cambios en todo el mundo, el archipi´elago de las Maldivas es particularmente sensible a ´estos, debido principalmente a su baja altitud. Este conjunto de islas situado en el centro del Oc´eano ´Indico constituye el pa´ıs m´as plano del mundo, con una altura m´axima que no supera los 2.3 m sobre el nivel medio del mar actual. En un pa´ıs donde las inundaciones ya son parte de su d´ıa a d´ıa, la subida del nivel del mar podr´ıa causar su completa desaparici´on.

Independientemente del aumento del nivel del mar, la causa principal de los episodios de inundaci´on en las islas Maldivas es el oleaje extremo (Wadey et al., 2017). Por su localizaci´on en el Oc´eano ´Indico ecuatorial, las Maldivas est´an expuestas a oleaje generado en el Oc´eano Austral y al oleaje generado por los monzones (Amores and Marcos, 2020).

Para simular num´ericamente y estudiar la interacci´on de estas islas con el oleaje ha sido necesario crear un perfil de isla t´ıpico de las islas Maldivas, cuyas caracter´ısticas generales son las de atolones coralinos, as´ı como contar con un modelo num´erico capaz de simular oleaje en zonas costeras, incluyendo la inundaci´on. A continuaci´on se exponen detalladamente los m´etodos utilizados para la obtenci´on de resultados.

2.1. Dise˜ no de Perfiles

Agrupadas en 26 atolones, este archipi´elago est´a compuesto por un total de 1190 islas de formas muy diversas, que se extienden a lo largo de 90000km2 formando una elipse de bancos de arena y barreras de coral (Figura 1). Para el estudio del efecto que genera el oleaje sobre estas islas, se ha construido un perfil de isla idealizado tomando caracter´ısticas generales de los atolones en Maldivas. La altura de la isla se ha fijado en 1.5 m sobre el nivel del mar actual, valor cercano al promedio de la altitud del archipi´elago (Wadey et al., 2017).

Estas islas se caracterizan por tener una protecci´on natural contra el oleaje en forma de arrecifes coralinos. La longitud de los arrecifes (RL, Reef Length) en las simulaciones num´ericas se ha definido en un rango entre 50 y 950 m, de forma que represente diferentes islas y diferentes niveles de protecci´on frente a un mismo oleaje (Amores and Marcos, 2020). Los arrecifes naturales tienen generalmente una longitud que est´a en la parte supe- rior de este rango; sin embargo, al usar un rango mayor de longitudes podemos explorar los casos de las islas donde se ha realizado trabajo de relleno para ganar terreno habitable, una pr´actica habitual en este archipi´elago. La zona del arrecife que recibe todo el impacto del oleaje, cresta, se ha considerado fija a una profundidad de medio metro bajo el nivel medio del mar actual, y con una longitud de 1 m. En la Figura 3 se observa un perfil de isla t´ıpico de este archipi´elago (panel a). En el panel inferior de la misma figura se encuentra el perfil idealizado generado para este estudio. En concreto se ha representado el perfil de costa de 550 m de longitud del arrecife.

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A este perfil se le han a˜nadido tres tramos m´as con tal de facilitar el funcionamiento del modelo num´erico. Dos de ellos representan el perfil de bajada al fondo marino a partir de la cresta de coral que protege la isla. Para ello se ha considerado suficiente una profundidad de 40 m, alcanzados mediante una ca´ıda que representa la pared del arrecife que queda abierta al oc´eano. Por otro lado, se ha a˜nadido, a esta profundidad, un tramo de 1 km de longitud, necesario para que el oleaje generado por el modelo pueda desarrollarse, y llegue al arrecife cumpliendo las condiciones necesarias para representar un oleaje t´ıpico de esa zona.

Por ´ultimo, se a˜nadi´o al inicio del perfil una zona de acumulaci´on donde el agua, en caso de inundar, pudiera acumularse proporcionando una manera f´acil de calcular el caudal, as´ı como datos ´utiles para el estudio del riesgo de inundaciones.

Figura 3: Panel a) Perfil de isla t´ıpico de Maldivas, imagen modificada a partir de Lesser (2004). b) Perfil idealizado utilizado en este estudio (concretamente el perfil de longitud del arrecife de 550m), junto con una ampliaci´on de la zona de la isla y la zona de acumulaci´on.

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2.2. Modelo num´ erico de propagaci´ on de oleaje: SWASH

Para realizar un estudio del efecto del oleaje sobre las costas maldivas, se ha utiliza- do un modelo num´erico de simulaci´on de oleaje. En concreto el modelo utilizado fue el SWASH1 (Simulating WAves till SHore). Este modelo resuelve la fase de la ola y es uno de los modelos m´as extendidos del estado del arte para simular fen´omenos inestables, no hidrost´aticos y de transporte en aguas costeras, especialmente ´util para el estudio de la zona de swash.

Se trata de un c´odigo abierto construido a partir de las ecuaciones de aguas poco profundas no lineales (NLSW - Non-Linear Shallow Waters), incluyendo la presi´on no hidrost´atica, siendo posible tambi´en la aplicaci´on de ecuaciones de transporte si el estudio lo requiriese (aunque no es nuestro caso). Este modelo num´erico toma como punto de partida las ecuaciones de Navier-Stokes y Euler, que pueden considerarse como ecuaciones de NLSW, incluyendo variaciones en la aceleraci´on vertical (Zijlema et al., 2011). Esta estructura vertical del flujo, que para un modelo no hidrost´atico, a diferencia de los de Boussinesq, es parte de la soluci´on, puede ejecutarse dividiendo el dominio en un n´umero de capas fijas. Se trata entonces de un modelo multicapa. Otra gran diferencia con los modelos num´ericos de Boussinesq es que SWASH mejora su dispersi´on aumentando este n´umero de capas, en vez de aumentar el orden de las derivadas. Esto supone una ventaja a nivel computacional, as´ı como mejoras significativas en los resultados obtenidos para simulaciones de oleaje cerca de la costa, y simulaciones que supongan eventos de rotura de ola.

Los modelos de simulaci´on de oleaje convencionales son ´utiles para estudiar el impacto que genera dicho oleaje al llegar a las costas o al impactar contra la cresta del arrecife.

SWASH nos permite a˜nadir al estudio los efectos generados en el interior de las estructuras terrestres, en nuestro caso de las islas del archipi´elago. Esto se consigue gracias a que el modelo es capaz de reproducir el rebase de agua sobre estructuras verticales (overtopping).

En este punto radica la importancia del modelo, siendo especialmente ´util para el estudio de inundaciones en zonas de riesgo.

Este modelo calcula la evoluci´on temporal de la elevaci´on de la superficie, as´ı como el conjunto de variables relacionadas a estos cambios. El modelo se ejecut´o en una malla de 1D con una resoluci´on espacial de 1 m y una longitud que var´ıa entre 2579 y 3479 m, dependiendo de la longitud del arrecife. Adem´as, el tiempo total de cada simulaci´on debe ser suficientemente largo para conseguir el completo desarrollo del oleaje en todo el perfil 1D, y alcanzar condiciones de estado estacionario sobre el oleaje generado. En nuestro caso fue seleccionado un periodo de simulaci´on del modelo de una hora, lo que conllev´o un tiempo computacional aproximado de 3 semanas para todos los casos descritos m´as adelante. Ha sido necesaria una selecci´on previa en base a la cantidad de informaci´on guardada y el espacio de disco necesario, intentando que el balance de carga computacional y resoluci´on de los resultados sea coherente. Respecto a esto ´ultimo, SWASH ha sido validado en gran cantidad de estudios, y reconocido como un modelo num´erico eficaz, por su bajo coste computacional en relaci´on a su elevada resoluci´on espacio-temporal.

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Para este estudio se guardaron dos ficheros de datos para cada combinaci´on de variables de entrada (definidas en la secci´on 2.3). Cada uno de los ficheros de salida se describe a continuaci´on:

1. Primer archivo: ’Data’

Este archivo contiene una serie de variables guardadas en los puntos con la resoluci´on de escala espacial mencionada anteriormente, de 1 m. Se guarda el valor promediado en el tiempo durante todo el periodo de simulaci´on de dichas variables para cada punto (promedio temporal por tanto). Las variables de inter´es son:

Hrunup: Altura m´axima alcanzada por el movimiento de ascenso y descenso del oleaje, en m.

Hs: Altura significativa de ola. Media aritm´etica de la altura del tercio de ola m´as alta, en m.

Set-up: Elevaci´on temporal del nivel del agua provocado por la rotura del oleaje, en m.

MVksi: Promedio temporal de la velocidad en la direcci´on del grid, en m/s.

2. Segundo archivo: ’PerFinal’

En el caso de este archivo hay un cambio en las escalas espacio-temporales guarda- das, siendo en este caso ´unicamente relevante el punto inicial del perfil. Es el punto de acumulaci´on representando en la Figura 3 (panel b). Este archivo nos propor- ciona los datos de caudal necesarios para el estudio de inundaciones en una serie temporal con una resoluci´on de 0.2 s en la zona de acumulaci´on creada al inicio de la isla.

En algunos casos muy concretos hemos guardado un tercer archivo, ’Perf ’, que nos proporciona informaci´on de todo el perfil en cada instante de tiempo. De esta manera hemos podido reproducir la simulaci´on completa y visualizar mejor el oleaje. Este tercer archivo ´unicamente ha sido guardado para casos seleccionados debido a su alto coste, tanto computacional como de almacenamiento.

Es importante tener en cuenta que el modelo se fuerza con determinadas condiciones de oleaje incidente definidas por valores de altura significativa de ola (secci´on 2.3), que es un par´ametro promediado. Esto implica que puede haber series temporales de varias alturas de ola que son estad´ısticamente consistentes con el forzamiento pero que pueden ser distintas. Por lo tanto, no es conveniente limitarnos a generar una ´unica simulaci´on por caso para cada altura significativa de ola, ya que podr´ıamos estar cometiendo errores de sobre valoraci´on de algunos par´ametros o por el contrario desestimando otros posibles efectos. En el modelo introducimos un factor de aleatoriedad que permite la simulaci´on de oleajes realistas, distintos entre ellos pero consistentes con los par´ametros que definen el oleaje de entrada. En nuestro caso, debido al las limitaciones de espacio y tiempo, el n´umero de repeticiones de cada combinaci´on se fij´o en 20.

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Cabe destacar que durante la realizaci´on del trabajo se han encontrado problemas de funcionamiento del modelo relacionados con los modos evanescentes, que son ondas que presentan un decaimiento exponencial. Podemos pensar en estos modos como variaciones bruscas de la superficie libre, caracter´ısticos en oleaje de corto periodo. Estos modos no contribuyen en el transporte de energ´ıa y pueden generar incoherencias en los resultados de algunas simulaciones.

2.3. Forzamientos

Los forzamientos de las simulaciones num´ericas son una combinaci´on del oleaje t´ıpico de las Maldivas con las proyecciones de aumento de nivel del mar. Los cambios en los riesgos de inundaci´on vendr´an controlados por este segundo factor. Bajo un escenario clim´atico RCP8.5, considerado el m´as negativo en t´erminos de emisiones de gases de efecto invernadero, el nivel del mar aumentar´a hasta 1 m globalmente (P¨ortner et al., 2019) a finales de siglo. Para este trabajo adoptamos valores de RSL en el rango de 0 a 1 m, a intervalos de 0.25 m, consistentes con las proyecciones del IPCC AR5 Y SROCC a lo largo del presente siglo. Teniendo en cuenta que la altura media del archipi´elago maldivo es de poco m´as de 1 m (Wadey et al., 2017), obviando cualquier otro tipo de contribuci´on, para finales de siglo muchas islas ser´ıan inhabitables si no se toman medidas de protecci´on y adaptaci´on. Adem´as del impacto del RSL, en Maldivas el oleaje es el factor determinante en los eventos de inundaci´on. Su incidencia e impactos dependen de la morfolog´ıa de las islas y en gran medida de la longitud del arrecife. Es habitual realizar proyectos que usan parte del arrecife para aumentar las zonas habitables en las islas, reduciendo la longitud del arrecife y por tanto la protecci´on.

El forzamiento del oleaje se obtiene de modelos globales de oleaje forzados por modelos atmosf´ericos. Las olas generadas por viento pueden llegar a recorrer enormes distancias, debido a que dispersan muy poca energ´ıa. Una vez las olas han abandonado la regi´on donde se han creado, pasan a llamarse swell. Pueden diferenciarse cuatro grandes puntos de formaci´on de swells en todo el mundo, de los cuales destacan los del Hemisferio Sur (Amores and Marcos, 2020). El m´as significativo de ellos se extiende desde 65oO hasta 70oE, y es el responsable de m´as de 100 eventos de swell al a˜no, de los cuales m´as del 80 % alcanzan las costas maldivas. El archipi´elago es en realidad, alcanzado por las cuatro formaciones de swell (Figura 2), de las cuales la m´as relevante ser´ıa esta. Por ello los datos que usaremos para generar el oleaje t´ıpico de las islas se basar´an en el periodo Tp y la altura de ola significativa Hs que genera este swell, descrito enAmores et al.(submitted).

Los valores concretos de altura significativa de ola y de periodo de pico que se usan en las simulaciones se encuentran especificados en la Tabla 1.

Hs(m) 1.5 2.0 2.5 3.0 3.5 4.0 4.5 5.0 5.5 Tp(s) 14 15 16 17 18 19 20 21 22

Cuadro 1: Altura significante de ola y periodo caracter´ıstico del swell de Maldivas, con- junto de variables utilizadas para la generaci´on del oleaje. Extra´ıdos del art´ıculo Amores et al. (submitted) .

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Por acci´on del cambio clim´atico estos datos pueden sufrir cambios a lo largo del siglo.

Sin embargo, se ha considerado que los cambios provocados por aumentos del nivel del mar ser´an mucho m´as significativos que los debidos a cambios en las forma y frecuencia del oleaje.

3. Resultados.

En total, teniendo en cuenta las distintas morfolog´ıas (RL), proyecciones de nivel del mar (SL) y forzamientos de oleaje (combinaciones de Hs yTp), el n´umero de simulaciones es de:

(10×RL+ 5×SL+ 9×(Hs, Tp))×20 = 9000 simulaciones (1) Centramos los resultados obtenidos a partir de las simulaciones en dos grandes bloques.

Estos bloques representan el estudio del oleaje en dos zonas distintas del perfil. La primera zona hace referencia a la cresta y el arrecife de coral. La segunda, se centrar´a en el oleaje que consiga sobrepasar la isla y producir por tanto eventos de inundaci´on. Esta divisi´on en zonas de estudio permite observar fen´omenos distintos del oleaje y comprobar el gran papel que juegan los arrecifes coralinos como medio de protecci´on ante el oleaje incidente.

Como ya se ha mencionado, los arrecifes son pr´acticamente el ´unico medio natural de defensa con el que cuentan las islas Maldivas. Recientes trabajos de relleno amenazan la supervivencia de estos arrecifes y ponen en gran riesgo a las islas. Como se vio en la Secci´on 2.1 una manera de estudiar este efecto es modificando la longitud del arrecife. En esta secci´on comparamos la energ´ıa incidente frente a la energ´ıa remanente (indirectamente se mide la energ´ıa disipada por el arrecife). Usamos dos m´etricas diferentes para el an´alisis de la energ´ıa a lo largo del arrecife: la primera cuantifica el porcentaje de energ´ıa incidente que llega a la isla para determinar qu´e cantidad de energ´ıa ha sido absorbida por la cresta;

la segunda calcula la atenuaci´on de la altura significante de ola, ya que es una variable m´as intuitiva.

Para los eventos de inundaci´on, se usar´a el caudal sobre la isla como m´etrica. A pesar de su eficacia, los arrecifes no impiden la llegada de oleaje a las costas de las islas por completo, pudiendo en algunos casos sobrepasar sus estructuras terrestres.

3.1. An´ alisis de absorci´ on de energ´ıa en el arrecife

Este apartado se lleva a cabo usando las variables obtenidas en el fichero de datos:

’Data’, para cuantificar los cambios que provoca el arrecife sobre el oleaje. Usaremos como indicador las variaciones del flujo medio de energ´ıa (W EF) a lo largo de ´este, definido como:

W EF =ECg (2)

Donde Cg es la velocidad de fase o celeridad y E la densidad de energ´ıa por unidad de ´area, calculada en el Anexo I. Por definici´on, adem´as:

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Cg = ω k = λ

Tp (3)

E = 1

8ρgh2 (4)

Donde ω es la frecuencia angular, λ la longitud de onda, ρ la densidad del agua y κ el n´umero de onda. Supondremos la densidad constante para toda la columna de agua, ya que hay muy poca profundidad en el arrecife. Adem´as h representa la altura de ola significativa (Hs) que nos proporciona el modelo. La relaci´on de la velocidad de fase con las variables que nos proporciona el modelo viene dada por la relaci´on de dispersi´on caracter´ıstica del oleaje provocado por swells (Anexo II).

ω2 =gktanh(kh) (5)

De aqu´ı se deducen dos reg´ımenes correspondientes a los casos l´ımites de la relaci´on de dispersi´on conocidos como aguas profundas (kh>>>1) y aguas someras (kh<<<1). En nuestro caso el estudio quiere realizarse en la zona del arrecife, donde nos encontramos en un caso intermedio. Es decir, λ es del mismo orden de magnitud que Hs (O(m)).

Pero la caracter´ıstica m´as relevante de los arrecifes es su capacidad de dispersi´on del oleaje incidente. El ´unico caso l´ımite capaz de representar olas dispersivas es el de aguas profundas. Haciendo esta aproximaci´on, respaldada en numerosos estudios, obtenemos:

ω2 =gk (6)

Conociendo la relaci´on de la frecuencia con el periodo, y usando las ecuaciones (3) y el resultado que hemos obtenido (6) obtenemos un flujo de energ´ıa:

W EF = 1

8ρgHs2Tp (7)

De la ecuaci´on anterior nos interesan los cambios a lo largo del arrecife. Por ello

´

unicamente nos centraremos en la parte variable de la ecuaci´on. Para los c´alculos reflejados en las figuras 4 y 5 se consider´o :W EF ∝Hs2Tp. El modelo s´olo proporciona los valores de altura significante de ola (Hs). Los valores de Tp se consideraron constantes respecto a la ola incidente a lo largo de cada simulaci´on, de manera que tomaban los valores expuestos en la Tabla 1.

Los resultados correspondientes al porcentaje de energ´ıa restante al llegar a la isla se representan en la Figura 4. Para generar esta figura se ha calculado una media aritm´etica de las 20 simulaciones para cada combinaci´on de energ´ıa incidente y RL, marcados en el gr´afico 4 con puntos negros, y despu´es se ha realizado una interpolaci´on para todos los valores intermedios. Cada uno de los paneles corresponde a un nivel medio del mar diferente. Independientemente del nivel del mar, se observa que el arrecife consigue disipar la mayor parte de la energ´ıa del oleaje incidente, llegando un promedio del 4 %. En los

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las costas, hasta valores del 1 %. Es interesante observar que, en general, la tendencia horizontal que se muestra en los paneles a, b y c de la figura, indica una independencia del arrecife con respecto a la energ´ıa incidente. Esto se interpreta como consecuencia de una gran eficacia del arrecife a la hora de disipar energ´ıa, siendo necesario muy poco recorrido para obtener una disminuci´on importante. Es probable que el momento de mayor disipaci´on de la energ´ıa se produzca en la cresta del arrecife, debido a la rotura de la ola provocada por el choque contra ´esta.

Para valores mayores de nivel del mar (paneles c y d) se observa un ligero cambio en el comportamiento, con mayor disipaci´on para energ´ıas m´as altas. Esto implicar´ıa aumentos en la eficiencia de disipaci´on al aumentar, no s´olo el nivel del mar, sino tambi´en la energ´ıa incidente. Este resultado podr´ıa deberse a factores f´ısicos que no se est´an teniendo en cuenta, como variaciones significativas en el periodo de ola, o transportes importantes de sedimento por fricci´on con el fondo coralino. Sin embargo hay que se˜nalar que esto son posibles explicaciones pero el estudio actual no permite revelar el mecanismo exacto.

Figura 4: Porcentaje de energ´ıa que llega a las costas de las islas en funci´on de la energ´ıa incidente. Los paneles a,b,c,d,e muestran diferentes aumentos del nivel del mar: 0, 0.25, 0.5, 0.75 y 1 m respectivamente

Es importante recalcar que una disminuci´on de m´as del 90 % de la energ´ıa incidente no implica que no llegue oleaje, especialmente para las energ´ıas altas, como veremos a continuaci´on.

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Otra manera, m´as intuitiva, de comprobar estos resultados es visualizando cambios en la altura significante de ola (Hs). Estos valores vienen proporcionados directamente por el modelo y se representan en la Figura 5. La representaci´on de esta figura se ha hecho igual que en la anterior (aqu´ı se han eliminado los puntos negros correspondientes a los valores concretos simulados). Se observan grandes similitudes con los resultados de la Figura 4, lo que es esperable debido a la proporcionalidad del flujo de energ´ıa con la altura significante de ola (ecuaci´on 7). Sigue habiendo una disminuci´on muy importante de Hs independientemente del aumento del nivel del mar (similitud entre todos los paneles), que en promedio es del 20 % de la altura inicial. Como era de esperar, a mayor longitud del arrecife, menor Hs en la costa. La disminuci´on de Hs es menos eficiente para valores de nivel del mar mayores.

En los paneles d y e de la Figura 5, se observan algunas anomal´ıas que podr´ıan estar relacionadas con los factores mencionados en al gr´afico anterior. Podr´ıan indicar la exis- tencia de ciertas combinaciones deHs incidente con longitudes del arrecife concretas, que aumentan la eficacia en la disipaci´on del oleaje incidente.

Figura 5: Altura significante de ola en el punto m´as cercano a la isla para diferentes longitudes del arrecife, y diferentes Hs iniciales, incluidas en la tabla 1. Los diferentes paneles representan diferentes escenarios de aumento del nivel del mar.

La eficacia de los arrecifes coralinos se evidencia en ambas gr´aficas. En el caso m´as

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grandes inundaciones. En otros casos en los que la isla tenga mayor altitud la inundaci´on puede no producirse ´unicamente por episodios de oleaje intenso de corta duraci´on, sino por periodos largos de acumulaci´on en la zona de swash, (set-up). Este an´alisis se profundizar´a en la siguiente secci´on 3.2.

3.2. An´ alisis de inundaciones

Cuando el oleaje llega a las costas interacciona con la batimetr´ıa de la zona condu- ciendo a un incremento en el nivel del agua (set-up) (Vousdoukas et al., 2018). El modelo SWASH es capaz de simular este incremento as´ı como la inundaci´on. En la secci´on ante- rior se ha comprobado que los arrecifes coralinos no son capaces de absorber el total de la energ´ıa de las olas (Figura 4) y por tanto, estos eventos se pueden producir bajo los forzamientos adecuados. En esta secci´on, el an´alisis que se lleva a cabo incluye diferentes alturas y periodos de oleaje as´ı como proyecciones de aumento del nivel del mar (secci´on 2.3), abarcando por tanto distintos escenarios futuros.

Figura 6: Representaci´on en escala logar´ıtmica del caudal que ha sobrepasado la isla, para diferentes escenarios de aumento del nivel del mar, y diferentes combinaciones de forzamientos y longitudes del arrecife. Como referencia de no inundaci´on se ha cogido los puntos inferiores a 0.001 m3/s por m lineal.

(19)

En la Figura 6 se representa el caudal como indicador directo del sobrepaso de agua (overtopping) en la isla. Aunque sabemos por los resultados de la secci´on anterior que el porcentaje de energ´ıa que llega a las costas es pr´acticamente independiente de la longitud del arrecife (Figura 4), este no es el caso cuando lo que nos concierne es la inundaci´on.

Se puede deducir de la inclinaci´on de las isol´ıneas de caudal constante en la Figura 6.

Como era de prever, a mayor longitud del arrecife, menor inundaci´on; y a mayor energ´ıa incidente, mayor inundaci´on. Sin embargo, el aumento del nivel del mar es el factor m´as relevante a la hora de generar eventos de inundaci´on. El caso de mayor inundaci´on se corresponde con unaHs de 1,2 m aproximadamente (Figura 5), y unTp de 22 s (Tabla 1).

Estos datos se corresponden con uno de los ´ultimos eventos de inundaci´on registrados en Maldivas (Hs=1.2 m y Tp=19 s), concretamente en la isla de Komandoo, en 2015. Este evento inund´o hasta 91 m a lo largo de la isla, aunque sin causar grandes da˜nos (Wadey et al., 2017).

4. Conclusiones.

En este trabajo se ha presentado una metodolog´ıa general para el estudio de la pro- pagaci´on del oleaje en un atol´on coralino y los impactos en t´erminos de inundaci´on, en un perfil idealizado que representa un isla t´ıpica en las Maldivas. En esta regi´on se han registrado alrededor de 30 eventos de inundaci´on en los ´ultimos 50 a˜nos, generados todos ellos por oleaje extremo (Wadey et al., 2017). Los resultados que aqu´ı se presentan sirven para explorar los mecanismos de inundaci´on y cuantificar el efecto de la morfolog´ıa en los impactos y vulnerabilidad de este tipo de islas, mediante la reducci´on de la energ´ıa incidente del oleaje. En ´ultima instancia, este tipo de trabajos pueden tener implicaciones en la necesidad de adaptaci´on y protecci´on de las islas.

El oleaje es el responsable principal de las inundaciones en Maldivas, debido a su localizaci´on en la regi´on tropical y su exposici´on a los intensos swells generados en el Oc´eano Austral. El mecanismo b´asico para explicar los procesos de inundaci´on incluye los efectos del run-up y el set-up (secci´on 3.2) generados por las olas incidentes cuando llegan a las costas de las islas, tras atravesar el arrecife. Sin embargo, debido a la escasez de observaciones (en gran medida por las dificultades t´ecnicas que entra˜nan en este tipo de entorno) el conocimiento de estos mecanismos es pobre en arrecifes coralinos. T´ıpicamente, cuando no existen datos sobre perfiles batim´etricos, se aproxima el set-up en costas como el 20 % de la altura de ola en aguas profundas (Wadey et al., 2017). En el caso de estructuras formadas por arrecifes coralinos, este valor puede forzarse incluso hasta un tercio de la altura de ola. En este trabajo se han teniendo en cuenta cambios en la batimetr´ıa t´ıpica de los atolones coralinos de las Maldivas, y se ha usado un modelo que simula en cada caso estos efectos y permite cuantificar la inundaci´on de una forma mucho m´as fiable y sin necesidad de estas parametrizaciones.

Los resultados muestran que la disipaci´on de energ´ıa incidente del oleaje por el arrecife supera el 90 % de la energ´ıa incidente, pero presenta diferencias en funci´on de la longitud del arrecife. A mayor longitud, menor energ´ıa llega a la isla y menor Hs. Por tanto, un arrecife natural de gran longitud es un mecanismo muy efectivo de protecci´on. En Maldivas

(20)

(Figura 4) permiten cuantificar el cambio en la energ´ıa incidente que llegar´ıa a una nueva isla reci´en creada y tienen por tanto una aplicaci´on directa.

Es importante recalcar que las proyecciones de nivel del mar, de hasta 1 m para final de siglo, generar´an eventos de inundaci´on mucho m´as frecuentes (Figura 6), en las mismas condiciones actuales de oleaje. De hecho, el aumento de nivel del mar es la principal causa en el incremento de riesgos de inundaci´on debido al cambio clim´atico. Tambi´en para el oleaje se proyectan cambios bajo distintos escenarios clim´aticos, aunque en este trabajo no se han tenido en cuenta estas posibles variaciones en la formaci´on y propagaci´on de los swells a lo largo del presente siglo. Recientes art´ıculos, entre ellos Amores and Marcos (2020), se˜nalan que el n´umero de eventos de swell por a˜no sufrir´a cambios, siendo la zona de las Maldivas una de las m´as afectadas, con incrementos entre el 12-20 % respecto al n´umero actual de eventos, y aumentos en sus periodos de pico (Amores and Marcos, 2020).

Asimismo, se proyectan variaciones enHsregionales, con los aumentos m´as importantes en el Oc´eano Austral, la zona de generaci´on de swells que afectan a las Maldivas (Hemer et al., 2013). La evaluaci´on de la combinaci´on de estos cambios en el oleaje con el aumento de nivel del mar queda por explorar; la metodolog´ıa expuesta ser´ıa, sin embargo, igualmente v´alida.

En resumen, este estudio eval´ua los riesgos a los que se exponen las Islas Maldivas y su relaci´on con el aumento del nivel del mar. Los resultados son adem´as extrapolables a otras regiones similares de arrecifes coralinos y sujetas a forzamientos de oleaje extremos.

Nuestros resultados recalcan la eficacia de los arrecifes como m´etodos de contenci´on y atenuaci´on del oleaje incidente y, por tanto, la importancia de preservarlos no s´olo como ecosistemas que favorecen la biodiversidad, sino tambi´en por su papel en protecci´on costera frente a forzamientos que amenazan la supervivencia de las islas.

(21)

5. Anexos.

Anexo I. Energ´ıa del oleaje

La energ´ıa del oleaje es la suma de su componente potencial, resultado del desplaza- miento de la superficie libre de las olas, y la energ´ıa cin´etica. Esta ´ultima se debe al propio movimiento de las part´ıculas a lo largo del fluido. La expresi´on resultante de la energ´ıa es v´alida para olas de tipo sinusoidal (Dean and Dalrymple, 1991).

Energ´ıa potencial

La energ´ıa potencial para un columna de agua es:

d(P E) =dmgz (8)

Donde z representa la altura respecto al centro de masas, y viene dada por la profundidad (h) y la superficie libre (η). Y el diferencial de masa por unidad de

´ area:

z = h+η

2 (9)

η= H

2 cos(kx−σt) (10)

dm=ρ(h+η)dx (11)

La energ´ıa potencial total para una longitud de onda ser´a:

P E= 1 l

Z x=x+L

x=x

d(P E) (12)

Sustituyendo la forma de la superficie libre, ecuaci´on 10, en la ecuaci´on 12, y apli- cando relaciones trigonom´etricas:

P E =ρgh2

2 +ρgH2

16 (13)

La energ´ıa potencial de las olas es la diferencia entre la energ´ıa potencial cuando hay olas y cuando no hay. Por tanto la ecuaci´on anterior representa la energ´ıa potencial total debida a una columna de agua. La energ´ıa potencial de las olas es:

P E =ρgH2

16 (14)

(22)

Energ´ıa cin´etica

La energ´ıa cin´etica que se asocia a un diferencial de fluido es KE = u2+w2

2 dm (15)

Donde en este caso el diferencial de masa es dm =ρdxdz. De la misma manera, la energ´ıa por unidad de ´area:

P E = 1 L

Z x=x+L

x=x

Z η

−h

d(KE) (16)

De la misma manera que se obtiene la forma de la superficie libre, tambi´en se conocen las ecuaciones de la evoluci´on de la velocidad de las olas progresivas:

u=−∂φ

∂x = H

2σcosh(k(h+z))

sinh(kh) cos(kx−σt) (17)

w=−∂φ

∂z = H

2σsinh(k(h+z))

sinh(kh) sin(kx−σt) (18)

Usando t´ecnicas de integraci´on, y relaciones trigonom´etricas se llega a la misma soluci´on obtenida para la energ´ıa potencial, ecuaci´on 14.

Por tanto la energ´ıa del oleaje por unidad de ´area es:

E =KE+P E = 1

8ρgH2 (19)

Anexo II. Relaci´on de dispersi´on

Para realizar c´alculos de manera relativamente sencilla ser´a necesario encontrar una soluci´on a las ecuaciones de movimiento de manera anal´ıtica. La relaci´on de dispersi´on que se expondr´a a continuaci´on es de uso extendido, y se extrae de solucionar las ecuaciones para ondas progresivas de profundidad constante (Mei, 1989).

La linealizaci´on de las ecuaciones de movimiento nos permite separar la parte espacial y temporal. De esta manera, las ecuaciones pueden combinarse como:

2φ= 0 (20)

∂φ

∂z (21)

g∂φ

∂z −ω2φ= iω

ρ pa (22)

La soluci´on en 2D, sin presi´on atmosf´erica directa (pa = 0) da como resultado para la relaci´on de dispersi´on:

ω2 =gktanh(kh) (23)

(23)

Referencias

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Amores, A., M. Marcos, R. Pedreros, G. Le Cozannet, S. Lecacheux, J. Rohmer, J. Hinkel, G. Gussmann, T. van der Pol, A. Shareef, and Z. Khaleel (submitted), Coastal flooding in the Maldives induced bymean sea-level rise and wind-waves: fromglobal to local coastal modelling, Journal of Geophyiscal Research.

Dean, R. G., and R. A. Dalrymple (1991), Water wave mechanics for engineers and scientists, vol. 2, World Scientific Publishing Company.

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Hemer, M. A., Y. Fan, N. Mori, A. Semedo, and X. L. Wang (2013), Projected changes in wave climate from a multi-model ensemble, Nature climate change, 3(5), 471–476.

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Vousdoukas, M. I., L. Mentaschi, E. Voukouvalas, M. Verlaan, S. Jevrejeva, L. P. Jack- son, and L. Feyen (2018), Global probabilistic projections of extreme sea levels show intensification of coastal flood hazard, Nature communications,9(1), 1–12.

Wadey, M., S. Brown, R. J. Nicholls, and I. Haigh (2017), Coastal flooding in the Maldives:

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159.

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Referanser

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